
"Dicen que la distancia es el olvido..."
Pocas veces escuche afirmacion más pelotuda.
Quien la haya inventado jamás ha sentido algo genuino por nadie.
Algo que pudiera llegar mas alla de unos cientos de kilometros que, en definitiva, no son más que eso, kilómetros.
La distancia no borra la memoria,
no acaba con sentimientos
no corta lazos,
no derrumba lo compartido.
Solo logrará anestesiar dolores,
rellenar vacíos,
reemplazar ausencias.
Y su éxito no será 100 % efectivo.
Bastará una palabra, una frase, una canción, una imagen para disparar una mandanada de emociones que,
hasta ese momento, creíamos olvidadas, adormecidas, superadas y a veces, incluso, hasta muertas.
Vaya entonces, a todo aquel que lea este texto, mi consejo de no dejarse engañar.
La distancia definitivamente NO EQUIVALE al olvido.
Hoy, más que nunca, puedo afirmarlo pues lo estoy sintiendo en carne propia.
No te olvidé, no te olvido.
Seguís ahí, sigo aquí.
A pesar de los kilómetros.
A pesar de las ausencias.
A pesar de los silencios.
Inalterable.
Invariable.
Inevitable.
Tan cercano como el primer día.
Tan presente como el primer día.
Tan audible, tan palpable como el primer día.
Y sigo pensándote igual, llamándote igual.
Sigo reafirmando que seguís siendo aquella luz.